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¡Mi propio diablillo!

¿Está desnudo y tú estás vestido?

Oh, mi camisa, tengo tanto frío que coger con la tuya.

¡Salgan!

Las tuyas.

¡Salgan!

¡Salgo!

Eh, a menos que estés vestido, esta vez no vamos a ver como un bebé.

¿Y él con pantalones y tú sin pantalones? ¿Qué has hecho?

Tú eres el que se queda grande a pesar de todo.

¡Pero bajemos!

¡La temperatura!

¡A ver!

¿No es eso lo que significa que puedes intentarlo aquí?

¡Sí!

¡Pero todas las niñas que no me han hecho nada!

¡Veamos si las descubrimos!

Quiero decir, ¿quieres intentarlo tú?

Sí, pero Ricardo la probamos nosotros, no antes, después de la prueba.

Mira, le voy a dar un poco de frío ahora mismo si estuviera bajo tierra.

No, no, porque esta vez ya lo tienes.

Ahora me la preparo, ajedrez de mí.

¡Esponjosa!

Vamos a ver cómo es.

Mientras tanto, haz otra moda. Tienes que volver abajo.

¡Abajo!

Vale, uno, dos y tres, intentad quedaros ahí.

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